Misterio ha sido revelado

Capitulo III

En la celda Conan pensaba en un plan, le pidió a Ran, quien aún no sospechaba de su verdadera identidad, que lo levantase para observar por la única ventana de la habitación, la cual estaba ubicada sobre la puerta, por ella observo que no existía nadie cuidando su celda, pero si una gran cantidad de personas se agrupaban en una habitación que estaba al fondo del pasillo, indudablemente Haibara se encontraba allí, por otro lado existía la posibilidad de que Ran derribara la puerta, pero era muy peligroso intentarlo a pesar que la salida estuviera a solo un par de metros, además estaban armados, si tan solo pudieran mantenerlos ocupados, debía existir otra posibilidad, pero en ese instante a Conan no se le ocurría ninguna, hasta que un ruido interrumpió sus pensamientos, era el sonido de las sirenas policiales, quienes rodearon el edificio, en el interior reinaba el pánico todos intentaban escapar, esta era la oportunidad que esperaban.
- ¡Ran! Derriba la puerta – ordeno Conan.
- Claro...ah.
En el primer intento cayó, luego todos se dirigieron a la salida, menos Conan, quien tenia que ir a otro lugar antes, pero mientras se acercaba a la puerta donde estaba Haibara, una fuerte explosión inundo el lugar, iniciando un incendio, con un gran esfuerzo llego aquella habitación, Gin y Vodka, ya no estaban en el lugar, como si presintieran lo que iba suceder, solo quedaba un sujeto, quien llevaba a Haibara entre sus brazos, la cual estaba inconciente, Conan tenia que evitar que se la llevasen, por esto presiono su cinturón, utilizando el balón que salio de ahí derribo al hombre de Negro, tomo a Haibara, escaparon por una rendija que daba al exterior, en la salida se escuchó un disparo, sin lugar a dudas el sujeto se suicidó, ante el miedo del castigo que le tendría preparado la organización si fallaba.
Todos estaban preocupados por Conan y Ai, en eso entre humo se observó una silueta, la cual correspondía a Edogawa, llamaron a la ambulancia y se los llevaron de inmediato.
Ai solamente estaba inconciente se recuperaría en un par de horas, pero Conan estaba gravemente herido, ya que había sido alcanzado por la explosión, por lo tanto las siguientes horas iban a ser cruciales.

De aquello había pasado una semana y Conan estaba recuperado por completo, aunque aún permanecía hospitalizado. Ran lo visitaba frecuentemente, Kogoro por otro lado convenció a todos los presentes que el secuestro fue planeado por uno de los criminales que el había capturado mediante “sus deducciones”, las cuales ya tenia asumido que el no realizaba, después de una exhaustiva interrogación hecha a Shinichi, comprendió en la situación en que este se encontraba y prometió no mencionarle nada a Ran ni a la policía.
Mientras Heiji visitaba a Kudo, este preguntó sobre lo que pretendía hacer de aquí en adelante.
- No lo se, pero ya no puedo permanecer más en Tokio, mi mayor temor ya se convertío en realidad, ella ya esta muy involucrada en el asunto, jamás me perdonaría se la llegasen a herir.
- ¿Le piensas contar que eres Kudo?
- No, es mejor asi. Enterarse de que por mi causa estuvo secuestrada, además la organización que me persigue ya se entero de mi identidad, ahora la situación esta más complicada que antes.
- Kudo…-murmuro Heiji.
- ¡¿Por qué…Por qué no confiaste nunca en mí?! – grito Ran, quien sin querer escuchó todo – ¿Pensaste que se lo contaría alguien?
- Ran…yo – dijo Conan.
- Cálmate Ran, todo tiene una explicación, tu escuchaste mal…yo dije Judo – intervino Heiji.
- Van a continuar con las mentiras – dijo Ran, con lagrimas en los ojos – Todo este tiempo estuviste a mi lado, viéndome sufrir por ti, como fuiste capaz, ¡Te odio!-Marchándose de la habitación.
- Es mejor asi, de esta forma la despedida va a ser menos dolorosa.
- ¡Despedida!
- Si, una vez que me den de alta, me iré al extranjero, esperare que las cosas se calmen, continuare mi búsqueda.
- ¡Pero eso es mañana!
- Exacto, entre más pronto me marche, mejor será para todos, Heiji te deseo lo mejor-dijo con lagrimas en los ojos.